Tras la baja de alrededor del 1% en la nafta, las petroleras ya analizan un nuevo aumento en los combustibles, debido a la suba del precio del petróleo a nivel internacional.
Esta actualización se daría en noviembre, y sería de alrededor de un 9% en el caso de la nafta súper. Mientras tanto, el resto de los combustibles podría sufrir un incremento del 6%.
El presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, a mitad de año, afirmó que el precio de la nafta dependerá del precio mundial del barril de crudo. Cuando este bajó, el precio de la nafta lo hizo también; una baja imperceptible en el bolsillo pues significaban menos de $100 por litro. La baja en el precio estuvo compensada por la suba de impuestos y la tasa de devaluación mensual del 2%, sin impacto en la billetera del sector trabajador.
Ahora las diferentes refinerías se encuentran alerta ya que la suba les significará grandes y jugosas ganancias. El petróleo subió 13% en una semana.
El contexto internacional sacudido por los efectos de la guerra en Medio Oriente y la previsión de una desaceleración de la economía en China, empuja a las refinadoras a tomar como referencia el promedio internacional del precio del petróleo Brent "de forma de evitar trasladar la alta volatilidad actual al surtidor". "Un aumento al mes", dijo, para avisar que no habrá que esperar incrementos de la nafta y el gasoil en lo que resta de octubre.